"El año pasado, pasé 322 días viajando, lo que significa que tuve que pasar 43 miserables días en mi casa."

Up in the air, 2009

lunes, agosto 18, 2014

Revisar la correspondencia, los mensajes de texto, la basura que llena los buzones inexistentes que simulamos en nuestros bolsillos, esperar, esperar de nuevo, espera lamentable, lenta, denigrante. Intentar amordazar el tiempo en las esquinas, recordar los castillos de agua, los anillos que desaparecían apenas se acomodaban en tu dedo, la piel que se asomaba por descuido, la mano que no quería detenerse en ninguno de tus lados. Mirar las nubes grises, opacas, escuchar una letanía y un arrullo, masticar de mala gana el pan, las hojas. Sobrevivo el día así, contando las razones de ese tu silencio, haciendo muescas en la pared que insiste en su humedad, salir, saltar para llegar cansado a la orilla de mis sueños para, en caso de encontrarte, no tenga que huir. Así es el día del regreso sin regreso, el día de otro adiós, de otras canas, así, incomprensible sin ti, desdibujado sin ti, en un juego de sombras y vaho que se pierde en mis ausencias.

1 comentario:

Anónimo dijo...

.... Silencio, lamentable silencio...