"El año pasado, pasé 322 días viajando, lo que significa que tuve que pasar 43 miserables días en mi casa."

Up in the air, 2009

domingo, julio 30, 2006

El mar que inventamos

Serán otros los que crucen
el horizonte y sus gaviotas
nos toca la sal
el coral
ningún barco cruzará
para nosotros
y a miles de nudos
de velocidad
nos enredaremos en las hebras
más profundas del océano
Veremos con otros el sol
recargaremos nuestra cabeza
en otros hombros
en la playa poblada
de nuestra ausencia
y contaremos a esos otros
que en la periferia
ajeno al tiempo regular
existe
en una lámpara maravillosa
el mar que nosotros
inventamos

jueves, julio 27, 2006

No es miedo de morir
es vida
lo que me amarra en el fondo de mis años
es la almohada mullida de peces
y el reloj de pulsera y las aldeas
no es miedo de morir
no tengo duda
es la sombra de tus manos en mi cuerpo
las ventilas oxidadas
las navajas
la pintura roja hasta hoy inutil
sin paisaje
no es miedo de morir
ni de hospitales
de gangrena de colores
o de jeringas
es vida
natural
sin adornos
vida de palabras líquidas
de hechiceros
que juegan a las damas
en un sarcófago
de hormigas
y tiempo

lunes, julio 24, 2006

En los vagones el cansancio
entre parches y bolsas de pan
brilloso
el humus de aceite escurre
iluminado por la ráfaga amarilla
de las luces enfermizas
ciudad de siluetas y cantabares
la gente se refugia en sus cuartos
cuarteados
inundados de soledad y televisores
loz zaguanes se rien
y el letargo
de las caravanas de tristeza
que regresan a alimentar a sus pájaros
muestran cansancio
cuando remojan
las migajas de pan
que el café amarga
pensando que la noche ha llegado
y los días no se detienen
en su marcha de anillo
periférico
para una boda pactada

Filosofía y poesía

El filósofo quiere poseer la palabra, convertirse en su dueño. El poeta es su esclavo; se consagra y se consume en ella. Se consume por entero, fuera de la palabra él no existe ni quiere existir. Quiere, quiere delirar, porque en el delirio la palabra brota en toda su pureza originaria [...] El poeta está consagrado a la palabra ; su único hacer es este hacerse en él. Por eso el poeta no toma ninguna decisión, por eso también es irresponsable.

María Zambrano

domingo, julio 23, 2006

El paso hacia la luz
representa
las bancas de los parques y sus asalariados
la anciana y sus várices
arrojando sobras de sopa
a las palomas inflamadas
entre esa premura
los murales de cantera orinados
lapidan el poco espacio
de los perros costrosos
y el deshuesadero metálico
de los puestos metálicos
que esperan
Así empieza la mañana
en la ciudad carcomida
por su propia niebla


Foto de Patricia Curcio

viernes, julio 21, 2006

Para que no se duerman mis sentidos



Éramos, bajo un techo de hojas, gamos en el corazón del bosque; hierba fresca que jamás seria hollada. Éramos jugosa y brillante hierba por la escarcha perlada. Hoy no se ni quien soy. Y hoy no se ni a donde voy. Solo si hay llama de amor vuelve la esencia. Solo si la piel dormida despierta sabré quien soy, sabré hacia donde voy. Éramos la música en el murmullo de la corriente, el milagro del fuego, el terror al eclipse. Laderas éramos, que eran mares de espigas en el suave oleaje de lo que éramos. Hasta donde puede alcanzar la razón, éramos infinita cadena de azules quebradas. Bruma, seno de una tierra virgen. Hasta donde andará el corazón, éramos. Éramos primigenio mundo de abismos y luces. Paraíso calmo sin limite de distancias. En la profunda fronda, adormecidas fieras. Habitantes callados de las cavernas. Desde donde se mueven la mano y el ojo éramos astil, pedernal y bronce. Luego rueda, muralla, silo. Poco a poco, todo habría terminado. Éramos....

Manolo García

domingo, julio 16, 2006

Pasar de una concepción teológica o metafísica al materialismo histórico es simplemente cambiar de providencialismo. Si nos habituáramos a mirar más allá del contenido específico de las ideologías y las doctrinas, veríamos que invocar una cualquiera de ellas en lugar de otra no implica derroche alguno de sagacidad. Quienes se afilian a un partido creen diferenciarse de quienes lo hacen a otro, cuando todos ellos, desde el momento que escogen, coinciden en lo profundo, participan de una misma naturaleza y no se diferencían mas que aparentemente en la máscara que asumen. Es estúpido imaginar que la verdad depende de la elección, cuando en realidad, toda toma de posición equivale a un desprecio de la verdad. Por desgracia, elegir tomar posición es una fatalidad a la que nadie escapa. Todos debemos optar por una irrealidad, por un error, como convencidos a la fuerza, enfermos, agitados que somos: nuestros asentimientos, nuestras adhesiones son síntomas alarmantes.

E.M. Ciorán

viernes, julio 14, 2006

"Me veo a mí misma diciendo breve y prosaicamente que es mucho más importante ser una misma que cualquier otra cosa."

Virginia Woolf

miércoles, julio 05, 2006

Ven
antes que el diluvio nazca
y las ciudades se deslicen
fuera de nuestro alcance
No sigamos sin nosotros
anclados en la tolvanera
de mil novecientas noches
mudemos de dientes
vivamos en las galerías
en donde no pasa nadie
Que no ves que no tenemos
demasiado aire
y llevamos cosidos
los resabios de la prisa
Dejémonos después
sin ninguna amarra
y que mejores paisajes
invadan nuestros óleos
y que ninguna naturaleza
muera
cuando mejores
manos entiendan
nuestras ansias
y la pura luz
comprenda
que no logramos vivir a oscuras
sin esa gota de muerte
sin los prados
que se marchitan
si no los regamos


sábado, julio 01, 2006

Alguien dice
que en la noche del cohete
y la computadora
los verdaderos poetas
ya no escriben
sino piensan solamente
avanzan sin tropiezo
entre la nada y la materia
atraviesan cifras y galaxias
que quizás no existen
Yo mientras tanto
escribo solamente
solamente escribo
Otros dicen
que los verdaderos poetas
se ocupan del amor
de la primavera y de la muerte
yo solamente escribo
escribo solamente
Todo es palabra para mí
palabras centelleantes son los días
palabras mi corazón y mis costillas
y los diez mil objetos
zapatos sillas y botellas
que me rodean como lobos
palabras solamente
Y las diez mil parejas
que copulan en la tierra
como si fueran pájaros o peces
palabras solamente
Porque la poesía
que ahora mueve mi mano
mueve también millares
y millares de luceros
como si fueran cerillas
no dice nada la poesía
que ya no canta ni sonríe
ni solloza entre las flores
sino calla simplemente
en el tintero
¿Qué puedo yo agregar
a tanto silencio
sino silencio
más silencio
sólo silencio?

Jorge Eduardo Eielson