"El año pasado, pasé 322 días viajando, lo que significa que tuve que pasar 43 miserables días en mi casa."

Up in the air, 2009

martes, febrero 28, 2006

Solemos ser soles
a pesar de nuestras órbitas tan definidas
y de los saltos tan memorables
Sólo contemplamos
sin mostrar los gorgojos
de nuestras semillas
temporales
como los paisajes que se ven
en los asientos de ventana
como los charcos que se forman
cuando llueve
Si el tiempo lo permite
y se detiene
a pesar de nuestros lunares
solemos
ser
soles

sábado, febrero 25, 2006

Bocanada


Gracias por venir
Gracias porvenir

Puente. Gustavo Cerati

Para este año electoral

Entre otras cosas
tener un libro que desaparezca
al momento que se va leyendo
tener una hija que se llame Natalia
aprender a armar barquitos de papel
y ranas
pintar la casa
comprar un tren eléctrico
para ir de estación a estación
nadar entre cormoranes ytrasatlánticos
volar junto a un papalote
soltarlo
ver como se hace un puntito en el cielo
Todo eso si el azar lo permite
y los sueños maduran
todo eso en este año
relevante en que he nacido
con palabras disparadas al aire
de nuevo
más lindo
he nacido

miércoles, febrero 22, 2006

El albatroz

Por divertirse a veces suelen los marineros
cazar a los albatros, aves de envergadura,
que siguen, en su rumbo indolentes viajeros,
al barco que se mece sobre la amarga hondura.

Apenas son echados en la cubierta ardiente,
esos reyes del cielo, torpes y avergonzados,
sus grandes alas blancas abaten tristemente
como remos que arrastran a sus cuerpos pegados.

¡Este viajero alado, oh qué inseguro y chico!
¡Hace poco tan bello, qué débil y grotesco!
¡Uno con una pipa le ha chamuscado el pico,
imita otro su vuelo con renqueo burlesco!

El Poeta es semejante al príncipe del cielo
que puede huir las flechas y el rayo frecuentar;
entre mofas y risas exiliado en el suelo,
sus alas de gigante le impiden caminar.

Charles Baudelaire

Oscuridad hermosa

Anoche te he tocado y te he sentido
sin que mi mano huyera más allá de mi mano
sin que mi cuerpo huyera, ni mi oído:
de un modo casi humano
te he sentido.

Palpitante,
no sé si como sangre o como nube
errante,
por mi casa, en puntillas, oscuridad que sube,
oscuridad que baja, corriste, centelleante.

Corriste por mi casa de madera
sus ventanas abriste
y te sentí latir la noche entera,
hija de los abismos, silenciosa,
guerrera, tan terrible, tan hermosa
que todo cuanto existe,
para mí, sin tu llama, no existiera.

Gonzalo Rojas

martes, febrero 21, 2006

En esta llanura diluida
atenazada en la más corriente
de todas las tempestades
quédate al menos hoy
en mi morada ficticia
de ratoneras y bajorrelieves
Y que pase el tiempo
y en 300 años
tomemos el expresso de nuevo
hacia el mar de tinta que llena
los días de ese tiempo
anular
vertical
menos blanco
ancianito

domingo, febrero 19, 2006

No es responsabilidad del rezo ni de los cumpleaños Todos los días encuentro muñones y ojos cerrados falta de azucar almejas devoradas por las olas de concreto concreto que atropella los huecos que el sueño deja en los riñones desertores No se trata de orina o espasmos las palabras están hechas de mendrugos Revolotean oxidadas invadidas de plomo se callan como pájaros sanguinarios que escupen a los transeuntes Arrojemos las estrías y los dones que se nos dieron, la cabeza y el tronco vulnerado por enjambres, azotemos la nuca descerebrada en los escalones Que nadie llegue a vernos en estos momentos de Nilo y de serpientes, en plena mudanza entre trastos viejos y grasa impregnada en la estufa Que los barcos petroleros lancen sus anclas lejos del espinazo, que me dejen dormir mis lóbulos, que me dejen de mirar, que me suelten la cara los enfermos, que me deje en paz mi sentimiento bombardeado que me deje al menos hoy que me deje que me deje

Papalote

Por un tiempo seguí
la trayectoria de un papalote
a pesar de mi espalda cansada
y mi imposibilidad de acantilados
Alguna vez su cordel se enredo
con las muñecas de mis manos
y por momentos se detuvo
en las antenas de la ciudad y los campanarios
después no supe de él
pero todavía
cuando mis ojos naufragan
busco en el cielo
su rastro luminoso

viernes, febrero 17, 2006



Quién puede decirme a dónde te lleve el viento
quién conoce el aire que respiras
no lo sé
Quién dirá con el paso del tiempo:
no quiero verte llorar.
Yo sé que éste no es el final.

Papalote
U2

martes, febrero 14, 2006

Quisiera transformar el oro en piedra
las hojas de los libros en árboles de nuevo
la limonada y el té en manantial
encontrar la fuente de la vejez placentera
yel camino donde se cruzan todos los lugares
Lograr que mis manos toquen los espejos
y ninguna imagen se refleje
tronar los dedos y verte llegar
y desaparecer las puertas
pero yo
mago retirado
apenas consigo que el día transcurra
y la noche llegue
en este archipiélago
poblado por mis inventos

lunes, febrero 13, 2006

Un mago de Terramar

Me hubiera gustado conocer las ciudades del Archipiélago. Havnor en el corazón del mundo, y Ea donde nacieron los mitos, y Shelieth de las Fuentes en Way; todas las ciudades y todas las grandes tierras. Y también las pequeñas, las comarcas extrañas de los confines remotos. Navegar en línea recta hasta el paso de los dragones, y seguir hacia el oeste. O al norte, entre los témpanos de hielo. Hay quienes dicen que es una comarca más grande que todo el Archipiélago, y otros que no son más que rocas y arrecifes helados. Nadie lo sabe. Me gustaría ver las ballenas de los mares septentrionales...Pero no puedo. Tengo que ir a donde me lleva mi destino y dejar atrás las costas luminosas. Tuve mucha prisa y ahora no me queda tiempo. Cambié toda la luz del sol, y las ciudades y las tierras lejanas por un puñado de poder, por una sombra, por la oscuridad.

Úrsula K. Le Guin

domingo, febrero 12, 2006

Ligera la espiga
la pluma del buho
el agua
la piedra volcánica
¿Por qué ser más?
Seamos sol
amanezcamos siempre
Nací en la punta de una cuchara
no tengo remedio
duro poco
La gente sospecha que me marcho siempre
entre acróbatas y cazadores mercenarios
me gustan los caballos y los trenes
duro poco me amargo
los días me llenan de piedras el hígado
Las casas me son ajenas
apenas me conocen los perros los gallos
sin embargo en mi armario
un río de vidrio mantiene su cauce
y las estrellas parpadean cada vez
que apareces

jueves, febrero 09, 2006

Argumento para película con final feliz

Hombre coleccionista de sarcófagos
y adoquines de jardín
Mujer asidua a columpios y ieve de volcanes

Hombre de negocios sueña a mujer asidua
Mujer de casa sueña hombre coleccionista

Hombre coleccionista y mujer asidua juntitos
soñados por niño ojos de ventana

miércoles, febrero 08, 2006

Delfines



Hiro Yamagata

Margen

Al margen observo la llegada de los caracoles
las piedras con el nombre de cada uno de los ahogados
ninguno de mis pies sabe qué hacer en estas circunstancias
frente a los peces dorados y a la espuma
Veo pasar mis dardos el baúl de mis recuerdos
(pensé que se había perdido en la última inundación)
mis gatos esqueletos
el olor a chocolate de las tardes en espera
y yo
al margen
sin aletas dorsales y sin branquias
me quedo
contemplando el faro que pavimenta
el camino de las algas y los barcos

sábado, febrero 04, 2006

Te encuentro detrás de los renglones
asociada a este insomnio sin cabeza
estás hecha del mismo polvo estelar
que mis huesos
nos conocimos un siglo remoto
sin saber que existíamos
Nacimos hoy
¿No lo sientes?

Te presiento

viernes, febrero 03, 2006

Soy un castillo indefenso
dispuesto a la barbarie
Que nadie se llame a engaño
mis puentes son frágiles
y el aire se cuela por todos mis rincones
Mi plaza ha sido tomada
y una bandera extraña ondea
ante mis ojos
No tengo municiones
y mis brazos están cansados
que las naves avancen
que caigan los prisioneros
lo dije y lo reitero
soy un castillo indefenso
dispuesto a la barbarie

jueves, febrero 02, 2006

miércoles, febrero 01, 2006

Espero despertar
antes que los colmillos despostillados me alcancen
antes de que mis sábanas sean fantasmas reales
Que las calles están llenas de vida y siempre hay taxis
y los hospitales no cierran
Armemos pues caparazones de tortuga
o al menos tejamos algo para ellas
con estambre
y que el sueño tuyo me ayude
a ganar esta batalla
y a llevarles silabarios
a los muertos tan vivos
de mis sueños
a llevarles
por qué no
partículas iridiscentes
de arcoiris