"El año pasado, pasé 322 días viajando, lo que significa que tuve que pasar 43 miserables días en mi casa."

Up in the air, 2009

domingo, diciembre 11, 2005

Un rostro

Un rostro frente a tus ojos que lo miran y por favor: que no haya mirar sin ver. Cuando miras su rostro -por pasión, por necesidad como la de respirar- sucede, y de esto te enteras mucho después, que ni siquiera lo miras. Pero sí lo miraste, sí lo bebiste como sólo puede y sabe una sedienta como tú. Ahora estás en la calle; te alejas invadida por un rostro que miraste sin cesar, pero de súbito, flotante y descreída, te detienes, pues vienes de preguntarte si has visto su rostro. El combate con la desaparición es arduo. Buscas con urgencia en todas tus memorias, porque gracias a una simétrica repetición de experiencias sabes que si no lo recuerdas pocos instantes después de haberlo mirado este olvido significará los más desoladores días de búsqueda.
Hasta que vuelves a verlo frente al tuyo, y con renovada esperanza lo mires de nuevo, decidida, esta vez, a mirarlo en serio, de verdad, lo cual, y esto también lo sabes, te resulta imposible, pues es la condición del amor que le tienes.

Alejandra Pizarnik

2 comentarios:

Lo-que-serA dijo...

Esta mujer tiene un catálogo de matices extraordinario. Y sí, hay rostros que se miran sin ver y hay otros, también, que aunque no los mires, los ves.

Laura dijo...

Esta Alejandra era una grande! Locos? No! Genios, diría. La genialidad enloquece y convierte a la gente en extranjera del mundo.