"El año pasado, pasé 322 días viajando, lo que significa que tuve que pasar 43 miserables días en mi casa."

Up in the air, 2009

lunes, diciembre 05, 2005

Se puede hablar indefinidamente del destino de las revoluciones, políticas o de otro tipo: sólo un rasgo es común a todas, una sóla certeza se desprende cuando se las examina: la decepción que suscitan en todos aquéllos que creyeron en ellas con algún fervor.

E. M. Ciorán

1 comentario:

Lo-que-serA dijo...

Hay decepción, sin duda. Pero también alegría de haber creído.